Conforme vamos teniendo más edad, el cuerpo sufre cada vez más cambios y presenta algunos dolores. Para combatir todo ello y poder llevar una vida mucho más funcional, debemos seguir algunas pautas muy sencillas, llevar a cabo las actividades de nuestro día a día como ir a la compra, limpiar la casa, recoger a los nietos, subir y bajar las escaleras…
- CAMINAR: Camina cada día, mejor aún si vamos acompañados para poder mantener alguna conversación y hacerlo más ameno.
- PARTICIPA EN SESIONES DE GIMNASIA: Busca algún lugar donde dos o tres veces en semana puedas realizar actividad física y ayudarte a mejorar la musculatura, el control postural, movilidad, flexibilidad, agilidad, coordinación, y además, podrás hacer nuevas amistades de forma divertida.
- NO PASAR MUCHAS HORAS SENTADOS: Cuando estés en casa, por ejemplo viendo la televisión, puedes realizar ejercicios y movimientos con los brazos y piernas.
- LEER Y ESCRIBIR: Leer cada día ya sea el periódico, una revista, algún libro… hará que mantengas la mente ágil.
- DESCANSA SOLO EL TIEMPO NECESARIO: Descansa sin exceso para que haya un equilibrio entre el descanso y la actividad.
- HACER TÉCNICAS DE MEDITACIÓN O RELAJACIÓN: Dedicar unos 5 minutos al día a tu bienestar más profundo, preferiblemente antes de acostarnos, sentarse cómodamente, cerrar los ojos, hacer respiraciones profundas y dejarnos llevar por pensamientos positivos.
- CONTROLAR LA ALIMENTACIÓN: Comer fruta y verdura cada día, buscar un equilibrio entre lo que comes y el ejercicio que realizas, evitar excesos de grasas, alcohol o cafés, y beber suficiente líquido cada día como agua, caldo, zumos…
- RELACIONARTE CON OTRAS PERSONAS: Sobretodo con aquellas que transmitan optimismo
